¿Césped artificial que no queme?

Partiendo de la base que todos los modelos de césped artificial se calientan al sol, sean como sean y estén fabricados en cualquier material, vamos a ver qué factores tenemos que tener en cuenta a la hora saber qué hace que unos se calienten más que otros y conseguir el cesped artificial que no queme o al menos no tanto.

El color del césped artificial influye

El color del césped artificial puede influir en su capacidad para absorber o reflejar la luz solar. Los colores más oscuros tienden a absorber más calor y hacer que la superficie se caliente más rápido. Por otro lado, los colores más claros, como el beige o el verde claro, reflejan más la luz solar y tienden a mantener la superficie más fresca.

Si estás considerando instalar un nuevo césped artificial, es posible que desees elegir uno que tenga un color claro para evitar que se caliente demasiado. De esta manera, podrás disfrutar de tu césped artificial incluso en los días más calurosos.

Más mullido, no siempre es mejor

El espesor del césped artificial también puede influir en su capacidad para absorber o reflejar el calor. Los céspedes artificiales más densos y mullidos tienden a retener más calor y a calentarse más rápido que los que son más delgados. Si quieres evitar que tu césped artificial se caliente demasiado, deberías optar por uno que tenga una densidad menor. De esta manera, el aire podrá circular a través del césped artificial y disipar el calor más eficientemente.

Aplicar arena de silice

Otra forma de evitar que el césped artificial se caliente demasiado es aplicar arena de sílice. La arena de sílice es un tipo de arena que se utiliza para llenar los espacios entre las fibras del césped artificial. Esto puede ayudar a mantener las fibras del césped artificial más frescas y reducir la temperatura de la superficie en general.

La arena de sílice también puede ayudar a mantener las fibras del césped artificial en posición vertical, lo que puede hacer que el césped artificial tenga una apariencia más natural.

Refrescar la zona con agua

Finalmente, otra forma de mantener tu césped artificial fresco es rociarlo con agua de vez en cuando. El agua puede ayudar a enfriar la superficie del césped artificial y disipar el calor. Rocía el césped artificial con agua limpia varias veces al día para mantenerlo fresco.

Conclusión

En resumen, si tu césped artificial se calienta demasiado en los días calurosos, hay varias formas de evitarlo. Desde elegir un césped artificial con un color claro y menos denso, hasta aplicar arena de sílice y rociar con agua, hay muchas soluciones para mantener el césped fresco y cómodo. Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de tu césped artificial sin preocuparte por el calor.